- Raciones: 4 Persona(s)
- Tiempo de Preparación: 10
- Tiempo de Cocinado: 40
- Calorías: 220
- Dificultad:
Media
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La asadura de cordero, también conocida como asadurilla de cordero, es un plato tradicional de la cocina castellana que incluye diferentes vísceras del cordero, normalmente pulmones e higado, aunque también es habitual el corazón, y hay gente que incluye los riñones, y hasta las mollejas o la lengua.
La casquería puede que no sea del gusto de todos, pero sin duda, la asadurilla de cordero es un plato con un sabor muy particular, salvaje y rústico que recomiendo probar a todo el mundo. Mi abuela la preparaba en fechas especiales, y puede que sea porque estoy acostumbrada, pero personalmente me encanta esta receta.
Su origen es incierto, pero al ser un plato sencillo y barato, que permite aprovechar al máximo la pieza de cordero o lechazo, su receta ha sido habitual entre las recetas de la abuela de toda España y más especialmente aún en estas fechas de Semana Santa. Sin embargo, a lo largo de todo el Mediterraneo encontraremos diferentes recetas relacionadas con los despojos del cordero (también conocidos como coladilla en algunas regiones) que se asemejan mucho a nuestra receta de asadurilla de cordero de la abuela.
Es un plato que vuelve a estar muy de moda, pero los años 90 no fueron buenos años para los amantes de esta receta debido a la enfermedad de las vacas locas que aunque nada tenía que ver con el cordero, propició que no hubiera disponibilidad de vísceras de ningún animal en las carnicerías.
Volviendo a la receta en sí, os voy a dejar unos estupendos consejos para que esta receta de asadura de cordero encebollada de la abuela os quede perfecta.
Asadura de cordero encebollada: consejos
- Se suele recomendar
limpiar bien las vísceras , dejándolas en remojo durante al menos 2 horas con una solución de agua y vinagre, pero si las vísceras son muy frescas y de buena calidad, con 5 minutos en agua fría con un chorro de vinagre es más que suficiente, y ni siquiera sería totalmente necesario.
- Es importante reseñar que cada víscera tiene
diferentes tiempos de coción, así como diferentes texturas. Por eso es importante el orden en que incorporemos a la cazuela cada viscera.
- En mi opinión, este plato está aún más rico si lo dejamos
reposar 1 día y lo recalentamos un poco antes de tomarlo.
- El
pimentón va un poco en función del gusto, pero una tapita de asadura de cordero con un ligero toque picante acompañado de un vaso de buen vino tinto es una auténtica delicia y como mejor sabe.
- Hay que tener en cuenta que cuando cortemos en
trocitos iguales en forma de cubo, estos trozos no deben ser demasiado pequeños ya que van a menguar de tamaño.
Ingredientes
Instrucciones
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- Empezamos limpiando los pulmones quitándoles la grasa, despues el higado, el corazón, y por último los riñones si queremos también incorporarlos a la receta.
- Lavamos todo en agua fría, como he comentado en los consejos, y secamos.
- Se corta la asadura en el siguiente orden: primero empezamos cortando los pulmones en trocitos en forma de cubo iguales y los apartamos. Seguimos con los riñones en caso de que hayamos querido introducirlos. Para ello, los cortamos por la mitad y retiramos la parte blanca de los mismos. Junto con el corazón, cortamos todo en trocitos iguales (de unos 2cm) en forma de cubo y también los reservamos. Por último, cortamos también el higado en forma de pequeños cubos (de unos 3 cm) y los reservamos.
- Se pone aceite en una cazuela para que se caliente.
- Una vez caliente, se añade la cebolla muy picada.
- Se refríe, dándole vueltas con una cuchara de madera hasta que empiece a tomar color. En este punto, y pasados 3 minutos, podríamos añadir si lo deseamos 1 diente de ajo y cocinarlo durante 30 segundos.
- Se agrega la asadura cortada pero no toda de golpe. Empezamos primero con los trocitos de pulmón. Escucharás que emite unos pequeños silbidos debido al efecto del calor. En cuanto dejes de escuchar estos silbidos y veas que se han desinflado (suele tardar unos 5 minutos), añade el corazón y los riñones. En cuanto se pongan un poco blancos, añade finalmente el hígado y revuelve hasta que todo quede con un delicioso tono dorado.
- Se añade el pimentón, removiendo rápidamente, los tomates pelados y cortados en trozos sin simientes, el vino blanco, las hierbas aromáticas y la sal.
- Se tapa la cacerola y, a fuego muy lento, se cuece durante 30-35 minutos, removiendo de vez en cuando para que no se pegue. Dependiendo de lo bajo que hayamos puesto el fuego podría estar un poquito antes. Cuando quede poca salsa comprobamos si ya está en su punto. Si aún no lo está, echamos un poco de agua y seguimos cocinándolo.
- Se espolvorea con perejil picado y se sirve en una fuente después de dejarlo reposar al menos 30 minutos, aunque, como ya he comentado, está más rico si lo dejamos para el día siguiente.
- Para adornar se pueden utilizar triángulos de pan frito o patatas fritas en forma de dado.
- ¡Espero que te haya gustado la receta, y que la disfrutes mucho! Y si te ha gustado, por favor, déja un comentario que siempre se agradece.
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