Hoy os traigo un artículo de las que considero que son las mejores sartenes del mercado y que toda cocina debería en mi opinión tener.
Pero antes, me gustaría explicar un poco en qué debemos fijarnos o tener en cuenta a la hora de comprar una sartén, así como detallar los diferentes tipos de sartenes que podemos encontrarnos o que necesitaremos.
Cómo elegir las mejores sartenes
De todos los elementos que pueden conformar la batería de cocina, las sartenes son probablemente la pieza más importante, resultando versátiles, útiles y provechosas.
También constituyen uno los principales quebraderos de cabeza, pues a menudo, dejándonos guiar por la publicidad engañosa, incurrimos en decisiones erróneas que no obedecen a nuestras necesidades.
No todas las sartenes son iguales, ni sirven, por supuesto, al mismo propósito, así como tampoco cuentan con la misma calidad de construcción y durabilidad.
Las diferentes técnicas de cocinado: salteado, plancha, pochado, rehogado y sofrito, entre otras, demandan distintos tipos de material, amoldándose mejor a unos que a otros, lo que tendrá un peso notable en las cualidades organolépticas de los alimentos que cocinemos en ellas.
¡Sí, como lo has oído, el recipiente de cocinado influye sustancialmente en el sabor y textura de los alimentos!
Evidentemente, no podemos pasar por alto unas de las características más apreciadas por los usuarios: la antiadherencia.
A título personal, y salvo casos muy concretos, considero que una persona o familia promedio puede solventar sus problemas en los fogones con simplemente tres sartenes, dedicando, eso sí, tiempo y esmero a su cuidado.
Muchos de vosotros estaréis cansados de lidiar constantemente con sartenes que no dan la talla ni cumplen con lo que prometen, degradándose con suma facilidad y obligándonos a pasar por caja nuevamente.
En las próximas líneas te enseñaré a elegir sartenes tan polivalentes como eternas.
Sartenes para usos específicos y generales
Sartenes especiales
Existen sartenes que atienden a usos más específicos, y otras que se desenvuelven con soltura en varios terrenos.
Por ejemplo, en mi blog de La Receta de la Abuela suelo emplear habitualmente una parisién, conocida también como gran fritura.
Se trata de una sartén honda con dos asas, fabricada en acero esmaltado, de precio muy económico, y que tiene diversos cometidos, desde la fritura o pochado, hasta la cocción de guisos o arroces, ya que nos permite introducirla en el horno. ¡Imprescindible para los amantes de la cocina!
Otra opción interesante es el sauté, que podríamos definir como una hibridación entre olla y sartén.
Disponen de tapa y un fondo grueso, fantástico para saltear o rustir.
Suelen estar hechos en acero inoxidable, material que por sí mismo posee propiedades antiadherentes cuestionables, sin embargo, es algo que paradójicamente se aprecia en la cocina, especialmente en el ámbito profesional.
La técnica de rustir consiste en dejar cocinar un alimento, normalmente una carne, a fuego lento, favoreciendo que los jugos se caramelicen en el fondo, para posteriormente ser disueltos mediante líquidos alcohólicos. Asimismo, y pese a esta especificidad de los sautés, pueden integrarse perfectamente en la cocina doméstica, mostrándose útiles para saltear, estofar, cocer arroces, freír o, llegado el caso, hacer algún alimento a la plancha.
Incluiré uno más adelante en mis recomendaciones.
Sartenes polivalentes
Aquí tienen cabida la inmensa mayoría de sartenes del mercado, independientemente de su tamaño o material de construcción.
Es el típico recipiente circular, con cierta profundidad, en el que se inserta un mango.
Lo que define la naturaleza de estas sartenes es el metal elegido para su fabricación, el recubrimiento antiadherente si lo hubiera, el mango, la inserción de este con el cuerpo y la base.
Salvo el hierro, que se usa más particularmente para plancha o salteado, el resto de las sartenes no tienen un radio de acción muy definido: valen para todo.
Sobre todo, debemos tener muy en cuenta el material con el que se han construido, lo que revelará su poder antiadherente, conduciéndonos irremediablemente a la duda existencial que nos corroe a todos, ¿existe un antiadherente duradero e inocuo?
Recubrimiento antiadherente y salud
En los últimos años las ciencias de la salud han puesto de manifiesto la importancia de la nutrición como remedio para paliar y prevenir la enfermedad.
Esto atañe no solo al balance de macronutrientes o densidad nutricional de los alimentos, sino también al recipiente en el que los cocinamos.
Diversas fuentes documentales del campo de la antropología coinciden que uno de los puntos disruptivos que propiciaron la revolución cognitiva, fue el cocinado de los alimentos, ligado a los recipientes contenedores que se ponían al fuego.
Con los avances en química, hemos podido saber que los metales cambian su estado si son sometidos a cierta temperatura, liberando compuestos volátiles que en un pequeño porcentaje pasarían a la sangre, pudiendo perjudicarnos.
Las alarmas saltaron tras someter a análisis los recubrimientos de teflón, marca comercial registrada que utilizaba PFOA como solvente para la fabricación del PTFE (material inerte), actualmente considerado como tóxico. De cualquier modo, no soy partidaria de recubrimientos de ningún tipo.
Aunque una sartén se publicite como libre de PFOA, los recubrimientos antiadherentes acaban desprendiéndose con facilidad incluso en las gamas altas, reduciendo drásticamente la vida útil de la sartén, y lo que es peor, transfiriéndose a los alimentos.
A pesar de todo, existen honrosas excepciones que ofrecen resultados formidables para aquellos que no quieran pasarse a las sartenes de acero inoxidable y hierro esmaltado, más difíciles de mantener, pero fantásticas cuando aprendemos a utilizarlas como es debido.
Tipos de sartenes atendiendo al material de construcción
Sería una tarea titánica analizar todos los materiales empleados en la fabricación de sartenes, por lo que nos centraremos en los más frecuentes, a saber: acero inoxidable, aluminio fundido, hierro fundido y cerámica.
Antes de meternos de lleno en sus particularidades, es preciso señalar que son generalmente compatibles con todo tipo de fuentes de calor: vitrocerámica, gas e inducción.
Analizaremos los pros y los contras de cada sartén, arrojando luz sobre su idoneidad en según qué circunstancias.
Acero inoxidable
Estamos ante un material de alta resistencia a la erosión y el calor. Pueden tener o no recubrimiento antiadherente, y brindan una distribución del calor inigualable.
Cubren un amplio rango de técnicas de cocinado, revelándose como una de las imprescindibles dentro de la batería de cocina.
Si optáramos por una sartén de acero inoxidable con recubrimiento antiadherente, buscaríamos que llevara alguna capa destinada a su protección: carbono, titanio o silicio.
Aluminio fundido
Por su bajo coste, el aluminio fundido es el metal más usado en la manufacturación de sartenes.
Son ligeras y fácilmente lavables, dos aspectos fundamentales para muchos usuarios.
En su contra, el aluminio se muestra contrastadamente frágil, además de ser tóxico para el organismo, lo que obliga a recubrirlo con un tratamiento antiadherente, el cual tiende a descascarillarse rápidamente.
Salvo que empleemos la sartén de manera muy puntual, es una opción poco recomendable.
Hierro fundido esmaltado
Quizá mi favorita.
Pueden someterse a altas temperaturas, y por sí misma, sin necesidad de un tratamiento que le confiera propiedades antiadherentes, logra salir airosas de los escenarios más complejos: fríe un huevo o realiza una tortilla de patatas.
Por si fuera poco, es de todos el material mejor asimilado por el cuerpo humano, amén de proporcionarle a los alimentos un gusto especial.
Sus mayores inconvenientes son el peso, el precio y el mantenimiento.
Cerámicas
Las sartenes cerámicas o, mejor dicho, con recubrimiento cerámico, se han puesto muy de moda en los últimos años, como alternativa al justamente denostado teflón.
Tienen una resistencia extraordinaria a la abrasión y el calor, lavándose cómodamente y comportándose francamente bien como antiadherente.
Pueden montarse sobre un cuerpo de acero inoxidable o aluminio, debiendo tener mucho cuidado a la hora de manipularlas, mimándola siempre con utensilios de madera o silicona.
Las mejores sartes para nuestra cocina
Una vez visto en qué deberíamos fijarnos antes de comprar una sarten, os dejo las sartenes que habitualmente utilizo y que recomiendo particularmente después de haber utilizado muchas otras, de muchas gamas diferentes.
Con estas 3 sartenes no necesitaremos ninguna otra y cuidándolas tendremos unas increíbles sartenes durante decadas, aunque si vuestro presupuesto es más ajustado, os dejo también un modelo más economico de la sartén de hierro y que, aunque es inferior a la primera opción, estaréis encantados con la misma.
Me gustaría también recalcar que ninguna de las marcas que recomiendo ha patrocinado en medida alguna este artículo o me ha pagado absolutamente nada por recomendarlas, siendo totalmente objetivos por mi parte los criterios para su recomendación.
Sauté Le Creuset (Ver sartén)
Alrededor de la gastronomía francesa han florecido marcas de sartenes que apuestas sin titubeos por la calidad como máxima aspiración.
Puede que a priori su precio parezca elevado, pero si tenemos en cuenta su proceso de fabricación casi artesanal, el proceso de control de calidad, y el hecho diferencial de que no se deterioran, posiblemente ya no nos parezca tan cara.
Le Creuset 3-Ply es un portento en la cocina, fabricado con un núcleo central de aluminio intercalado entre dos capas de acero inoxidable, permite una distribución totalmente uniforma del calor, defendiéndose con garbo en los fogones, el horno, el grill o cualquier tipo de placa.
Es fácil de lavar, admitiendo lavavajillas y requiere una cantidad mínima de grasa para su puesta en escena.
Precioso, duradero y con excelente comportamiento. Vale cada euro que cuesta.
Sartén de acero inoxidable WMF Profi Resist Sartén (Ver sartén)
WMF, el fabricante alemán enfocado a un público sibarita ha hecho de la innovación y la calidad su principal premisa.
Anteriormente aclaré que las sartenes de acero inoxidable no destacan precisamente por sus propiedades antiadherentes, lo que exige en algunos casos la integración con un sistema apropiado que termine por otorgarle esta cualidad.
Fabricada con un material multicapa de acero de Cromargan con núcleo de aluminio y exterior cromado, destaca como una de las mejores sartenes de su clase, reuniendo los aspectos positivos del acero inoxidable y solventado sus problemas de antiadherencia.
El revestimiento interno dispuesto en forma de panel de abeja es resistente a arañazos, respondiendo rápidamente a los cambios de temperatura, tolerando hasta 260º.
No es la sartén más ligera del mundo, pero presenta una calidad excepcional con un cocinado a la plancha totalmente inigualable, es rápida, apta para todo tipo de cocinas, y cuidándola durará decadas.
Sartén de hierro fundido esmaltado Le Creuset (Ver sartén)
Le Creuset nos deleita con una de las sartenes más interesantes del mercado, una joya que revive esos útiles irrompibles de antaño, la cual podremos dejar en herencia.
Esta sartén de hierro fundido esmaltado es perfecta para sellar carnes, pescados o saltear verduras y hortalizas.
Realmente, no se le conocen límites, agrupando una serie de características que la convierten en la mejor de las opciones posibles: eficiencia energética, mango de madera frío, distribución uniforme del calor y resistencia a golpes y arañazos.
El esmaltado interior, mediante el uso y la infiltración de aceite, va creando una pátina protectora que mejor su capacidad antiadherente con el uso.
Está fabricada en Francia, y debe limpiarse a mano para garantizar la integridad de su recubrimiento.
Una sartén excepcional que cuidándola podrás dejar de herencia a tus hijos. Mi tipo de sartén favorita donde freir un huevo o hacer una tortilla será una experiencia totalmente diferente. Recomendada al 100%. Válida para todo tipo de cocinas
Sartén de hierro mineral De Buyer (Ver sartén) - Sartén más económica
La mítica y atemporal sartén de hierro mineral De Buyer, fabricada en Francia, lleva acompañando en la cocina a aficionados y profesionales desde tiempos inmemorables.
Es una sartén de hierro diseñada para soportar altas temperaturas, sobresaliendo en la plancha, braseados, asados en parrilla u horno y salteados.
Hierro mineral 100%, ecológico, sostenible e inocuo para nuestra salud. Cabe señalar que debemos hacer hincapié en su mantenimiento.
Es susceptible a la oxidación. Ponerle freno a la corrosión es tan fácil como secarla muy bien después de su lavado, y cubrir su superficie interior con una fina película de aceite de oliva extendido con una servilleta.
Nada más recibirla, y con el objetivo de preservar su integridad, viene preparada con una capa natural de cera de abeja que hay que eliminar. Después de un lavado concienzudo, hay que curarla, proceso que consiste en poner una pequeña cantidad de aceite y calentarlo hasta el punto de humo.
Opción totalmente recomendable en caso de que nuestro presupuesto sea más limitado y no podamos hacernos con la sartén de hierro fundido esmaltado
Y hasta aquí este artículo sobre las mejores sartenes.
Espero que os haya resultado ameno y de utilidad este artículo, y si así ha sido no dudes en seguirme en Instagram para recibir las mejores recetas de la abuela en las que podréis poner a prueba vuestras estupendas sartenes para hacer suculentos platos.
Gracias por leerme.
